Atesorar recuerdos es una de las actividades favoritas de nosotros los humanos, nos agrada bastante inmortalizar las cosas en realidad. Debido a lo anterior inventamos la fotografía y ¿por qué no? seguramente los tatuajes también tienen que ver con eso.

El origen de este comportamiento no tienen tanta relevancia como el significado mismo de una foto o un tatuaje.

Sigamos con este último tópico y es que muy pocas veces alguien decide dejar una marca permanente en su piel si no tiene un buen motivo para hacerlo, quizás inspirados por eso último hoy te vamos a comentar acerca de un tatuaje que se ha hecho inmensamente popular entre los adultos contemporáneos.

Ahora lo que está de moda es tatuarse una cuerda roja alrededor del dedo más pequeño de la mano. ¿A qué se debe eso? Bueno, la explicación recae en una milenaria leyenda asiática. De acuerdo con el mito cada uno de nosotros está enlazado; unido a otro ser humano por medio de una cuerda roja que no se puede ver.

No importa la distancia que exista entre las dos personas estas siempre van a estar unidas porque son almas gemelas. Se supone que cuando los dos sujetos se pongan en contacto, basta con que se vean, sabrán que son el uno para el otro.

Muchos aficionados sostienen que esto es lo que justifica esos enamoramientos a primera vista, se trata de personas que están unidas por esa cuerda mágica. Lastimosamente a través de los tatuajes no se puede saber con quién se está enlazado porque los mismos no representan más que el final del cordón. Si te gustó este relato y quieres enterarte de los otros detalles del mito te invitamos a reproducir el siguiente vídeo.

Es probable que luego de verlo salgas corriendo al salón de tatuajes más cercano a tu casa para que te hagan uno.