En varios de nuestros artículos te hemos hablado acerca de muchos vegetales como el brócoli, el ajo y la cebolla que conviene no someterlos a cocción porque terminan perdiendo sus nutrientes esenciales. En el caso del tomate ocurre lo contrario.

Esta hortaliza tan común en nuestra dieta diaria puede ser considerada esencial en la alimentación y está presente en casi todas las comidas: ensaladas, caldos, guisos, estofados, sopa, salsas, sandwiches, pastas y hasta en la pizza! Se trata de una d

e los alimentos ideales que no pueden faltar en nuestros platos debido a su bajo nivel en calorías, además de su rico contenido en nutrientes que nos aportan importantes beneficios para nuestra salud.
¿CUÁLES SON LOS NUTRIENTES DEL TOMATE?

El tomate posee altas concentraciones de vitamina A, C, E, ácido fólico, potasio, fibra, polifenoles y antioxidantes.
La mayor parte de las investigaciones que estudiaron el cáncer de próstata hicieron foco en el licopeno, el pigmento característico de color rojo que posee el tomate.

¿POR QUÉ EL TOMATE PROCESADO EN LUGAR DEL CRUDO?

Los datos hablan por si solos. Veamos que nos dicen los estudios científicos. Según el U.S. Department of Agriculture Nutrient Database, una cantidad de 100 g de tomate crudo posee mas de 2500 mcg de licopeno mientras que 100 g de pure de tomate contiene algo menos de 29000, es decir, el puré de tomate es 10 veces más rico en licopeno que los tomates al natural o crudos.
¿A que se debe esta gran diferencia?

Simple. El 94.5% del peso del tomate puro o natural se compone de agua. En tanto, el tomate en puré, en su procesamiento, pierde gran cantidad de agua. Por tal moti

vo, el licopeno aparece en mayores concentraciones en éste último respecto al primero. Un estudio denominado “Propiedades funcionales y beneficios para la salud del licopeno” que fuera publicado en la revista “Nutrición Hospitalaria” reveló datos muy interesantes:

1- El licopeno es uno de los antioxidantes más poderosos y posee el efecto de eliminar el estrés celular oxidativo del organismo, protege la mucosa del intestino, favorece y mejora el metabolismo, optimiza la función hepática y protege la salud cardiovascular.

2- El licopeno al ser sometido a altas temperaturas en el proceso de cocción maximiza sus beneficios en nutrientes respecto de su estado natural o crudo.

3- Una excelente forma de optimizar y potenciar las propiedades del tomate es cocinarlo con aceite de oliva. Además, debe consumirse junto con la piel y la semillas.